“El movimiento como lenguaje universal que narra, más allá de las palabras, trascendiendo las edades y culturas, expresando desde lo más esencial y auténtico: el cuerpo”.
Proyecto NaNa
Por Estefanía Amatriain
Domingo veinticuatro de noviembre, día soleado en Madrid. Los rayos de sol entre los árboles de la Quinta de los Molinos nos cautivan, pero debemos entrar, nos espera una obra de danza-teatro para bebés de la compañía Proyecto NaNa. Nos asombra la cantidad de pequeños espectadores que esperan a que se abra la puerta para pasar al auditorio.
Al entrar, lo único que vemos es una lámpara de luz cálida que ilumina un montón de cojines coloridos de diferentes dibujos y formas. Todo el auditorio está lleno, padres, madres, bebés muy pequeños, niños un poco más mayores, y de repente… Se apaga la luz y comienza la magia.
Una chica con un mono gris y rojo desciende las escaleras poco a poco con movimientos muy suaves y armónicos, una canción magnifica y tranquila acompaña sus movimientos. La obra nos habla de dos personajes que tratan de conciliar el sueño, pero de maneras distintas. Debajo del montón de cojines descubrimos a la siguiente protagonista, vestida
exactamente igual comienza a moverse de forma lenta, como se mueve una persona recién levantada, y es en este momento cuando los dos personajes comienzan a interactuar. No hay conversación en ningún momento de la obra, pero no hace falta, mezclando danza y espectáculo consiguen transportar a nuestros pequeños espectadores al mundo del sueño.
Nos fijamos en las caras de estos; los bebés no apartan la mirada, los que son un poco más mayores están asombrados y los padres y madres satisfechos porque sus hijos están comprendiendo la trama. Continúa la obra y las protagonistas avanzan con la misma, se juntan, se separan, discuten y se arrastran, pero al final, entienden que lo importante no son los cojines únicamente, sino el calor humano, el calor del otro personaje. Las melodías cambian con sus movimientos y ayudan al espectador a comprender en todo momento los sentimientos y las sensaciones de los personajes. Paula Carmona, y Teresa Martín han hecho del auditorio un lugar mágico donde dejar a sus espectadores boquiabiertos.
A medida que avanzaba la obra, escuchábamos comentarios de los pequeños espectadores pero hubo dos que nos sorprendieron gratamente, y que si lo hubiesen escuchado las protagonistas les hubiese dado energía para continuar haciendo lo que hacen. “Lo he entendido, papá, y no han hablado” dijo un niño de 2 años y “justamente, así es como ha empezado el teatro”. Nos asombra, tanto la capacidad que han tenido las artistas para explicar la obra sin necesidad de utilizar palabras, como la capacidad de los niños para analizar y comprender las escenas.
De la misma forma que la niña del segundo comentario, nos damos cuenta de que están
organizando el escenario de la misma forma que al inicio. Llevamos alrededor de 35 minutos en el auditorio y… Se apagan las luces de nuevo, la obra ha llegado a su fin. Los pequeños espectadores aplauden y jalean, notamos en sus caras sonrisas y luminosidad, les ha emocionado la obra.
Se vuelven a encender y las protagonistas se sientan en el escenario mirando a sus espectadores, nos preguntan si nos ha gustado la obra, si la hemos entendido y nos animan a dedicar un aplauso al “mago de la sala”, el encargado de luces y sonido. Los pequeños espectadores juegan junto a ellas, tirando los cojines de la obra y practicando
puntería con sus padres. Tras este breve coloquio los personajes se despiden y abandonamos el auditorio.
El Proyecto NaNa, nos ha impresionado. La forma de unir danza y teatro, de apostar por un teatro que busca la reflexión y el desarrollo individual. Solo podemos decir «gracias», por esta oportunidad, por trasladarnos al mundo del sueño con el dinamismo y la armonía que lo han hecho.
Por Estefanía Amatriain
DATOS TÉCNICOS
Intérpretes: Paula Carmona Jiménez y Teresa Martín Sauceda
Dramaturgia: Teresa Martín Sauceda y Paula Carmona
Puesta en Escena: Proyecto NaNa
Diseño de iluminación: José Luis Vázquez Luengo
Ayudantes de Dirección: Anaïta Pourchot y Marc Torrents
Técnica de luz y de sonido: María Victoria Rosa
Imagen (vídeo y fotografía): Alejandro Figueras López y Esther Sánchez Astorga
Producción: Proyecto NaNa
Dirección y Coreografía: Paula Carmona Jiménez y Teresa Martín Sauceda
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