Corroc de Escarlata Circus

Por Eva Llergo

¿Qué es Corroc? ¿Circo, teatro de objetos, poesía, performance, una ínsólita visita a un museo de rarezas? Es una ardua tarea definir qué es Corroc para aquellos que no lo han experiementado. Aunque tal vez su propio nombre nos dé pistas para entenderlo y concretarlo. Corroc es la suma de corazón (cor, en catalán, pues catalanes son sus creadores Escarlata Circus) y roca (roc). Es a la vez un palíndromo que nos indica que esos dos objetos tan distantes no están, en absoluto, tan separados conceptualmente.

Y este juego de contrarios explica mucho de la esencia de este espectáculo tan bizarro. Bizarro es nuestro sentido español de valiente y en el sentido francés (tan usado en español) de extraño. Por otro lado, extraños y valientes son siempre los espectáculos familiares (como el resto de la programación) del Festival Frinje donde se enclava.

Es difícil definir Corroc sin atentar contra la magia de su secretismo, así que contaremos poco. Diremos que todo comienza antes de entrar en la sala, cuando nos cuentan la historia de un extraño coleccionista que mandó a los actores una serie de «objetos» para que iniciaran su propia colección. Captados por el halo misterioso del asunto, nos introducimos en la sala, a oscuras, y allí con un juego de linternas que alumbran las sucesivas instalaciones (todas fundamentadas en piedras con forma de corazón), moviéndonos y participando continuamente de la «exposición» descubrimos lo que, en esencia, es la intención última de Corroc: que la naturaleza es más grande y valiosa que otras muchas cosas por las que pagamos un dineral. Que pasamos por ella sin percibirla, y tal vez sin valorarla, cuando pertenece a nuestra propia esencia. De paso, se nos dan unas cuantas lecciones de arte, historia, cine, etc. que no pueden dejarnos tampoco indiferentes. Y para acabar, además, se nos invita a beber vino que calienta el corazón y a aceitunas que hacen soñar. ¿Quién da más?

A los adultos, Corroc no puede dejarnos indiferentes. Como decíamos es una experiencia, casi una lección vital y uno sale de allí algo distinto de  lo que entró. Otra cosa son las pequeños espectadores que captan lo que pueden según sus edades. Para el pequeño espectador de 8 la cosa tiene sentido, y capta el mensaje y el misterio del evento, con su halo casi de ritual iniciático. El pequeño espectador de 5, lamentablemente se queda fuera por cuestiones básicamente de vocabulario (que, a nuestro juicio, tal vez se podrían haber solventado con la elección de un discurso más llano; más teniendo en cuenta que el espectáculo se anunciaba como «a partir de 5 años»).  Y la pequeña espectadora de 3, contenta por poder estar sin zapatos en la alfombra en la que la sientan a escuchar, disfruta sobre todo de la parte final donde puede tocar las «piedras corazonadas».

Pero, independientemente de los planos que capte cada franja de edad, Corroc fue una experiencia, un soplo de verdad, y a nadie dejó indiferente.

Eva Llergo

DATOS TÉCNICOS

CORROC de Escarlata Circus

Festival Frinje 2016 (1 al 17 de julio)

Sala Madera, Matadero Madrid (Plaza de Legazpi, 8)

Días 2 y 3 de julio, a las 12h y a las 18h.