Por Laura y Elena Capote
Nunca se me ha dado bien la música… ¡aún recuerdo cómo desafinaba con la flauta cuando iba al colegio! Pero lo que sí me gusta es escucharla… y, sobre todo, me gusta ver la cara de mi sobrino de 4 años cuando le traemos algún instrumento nuevo de algún viaje, o cuando se pone a tocar el tambor o la armónica que le regalaron cuando tenía algo menos de dos años. Por el motivo que sea (ninguno somos grandes entendidos en estas cuestiones), a Daniel le gusta la música. Le gusta crearla y le gusta escucharla.
Por eso, en su último cumpleaños, pensando en qué regalarle, me vino a la mente una entrada a algún concierto infantil… y “trasteando” en Internet, vi varias opiniones que hablaban muy bien de Ara Malikian, un gran violinista que también organizaba conciertos para niños. Nunca había oído hablar de él, pero me picó la curiosidad y, aunque no encontré conciertos a la vista, pensé que en cuanto encontrase entradas para uno, se las regalaría. Y eso ocurrió hace poco más de dos meses… Estaba buscando entradas para otro espectáculo cuando me encontré con que ¡Ara Malikian daba un concierto para niños en el Teatro Lara de Madrid! No lo dudé, y compré las entradas. Ya sólo quedaban asientos con visibilidad reducida, lo que era una pena, pero no quería dejar escapar la oportunidad de que Daniel viese Mis primeras cuatro estaciones interpretada por Ara Malikian, el violinista del que tan bien hablaban las críticas.
Y, así, el domingo por la mañana llevamos a mi sobrino a ver y escuchar su primer concierto de violín. Antes del gran evento, le enseñamos algunos vídeos para que se fuera familiarizando con el espectáculo, ya que Daniel está acostumbrado a ver obras de teatro y cuentacuentos, pero nunca antes había estado en un concierto, a excepción de los de los grupos infantiles que cantan canciones populares, claro. En la entrada del concierto ya nos sorprendió cómo los niños son capaces de retener todo lo que experimentan cuando de repente Daniel gritó señalando a un chico que se acercaba al teatro: ¡Tía, es Ara, es Ara Malikian, el de la peluca!. Apenas un par de vídeos después, ya era capaz de reconocerle (algo a lo que ayuda su pelo, todo hay que decirlo), pero que nos hace pensar sobre el enorme poder de las experiencias que hacemos vivir a nuestros pequeños espectadores.
El espectáculo no defraudó. La música, principal protagonista, vino acompañada de toques de humor y de pedagogía. Un espectáculo divertido y entretenido, que va más allá del concepto de concierto clásico que tenemos. En él, una narradora nos va introduciendo las distintas estaciones, presentándonos las características de cada una de las melodías, ayudándonos a los no iniciados en el tema de la música a evocar aquellas sensaciones que pretendía Vivaldi y que tan virtuosamente nos presenta Malikian. De esta forma, pequeños y no tan pequeños espectadores comenzábamos a ser conscientes de cómo la intensidad, el tempo y la frecuencia se mezclan para jugar a ser el verano, la primavera, el otoño…
Pero no solo de música va la cosa, ya que Mis primeras cuatro estaciones es también en sí mismas un espectáculo, en el que Ara Malikian y los músicos que le acompañan, no paran de atraer la atención y el entusiasmo de los niños con sus peripecias y carreras por todo el escenario. Un espectáculo lleno de energía en el que también se fomenta la interactividad con el público, invitándonos a crear música con las palmas, con los dedos o con un silbido. Y, al llegar el inverno, todos, niños y mayores, ayudamos a crear la lluvia con nuestros dedos, manos y, finalmente, con nuestros pies, hasta desembocar en una gran tormenta. ¡Ya nos habían ganado! Un público infantil y en su mayoría inexperto en cuanto a música clásica se refiere pero, ahora sí, apasionado y motivado por llegar a casa y seguir practicando, escuchando y creando música.
Tras finalizar el espectáculo, 50 minutos después (tiempo adecuado teniendo en cuenta el público destinatario), no pude estar más de acuerdo con lo que había dicho Ara Malikian al presentar el mismo: “Gracias papás, mamás y abuelos por traer a los niños a ver este espectáculo; y gracias niños, por traer a vuestras mamás, papás y abuelos a ver este espectáculo”. Quizá nunca me hubiese planteado ir a un concierto de violín, pero me gustó, disfruté y vi disfrutar a mi sobrino, nuestro pequeño espectador.
Por Laura y Elena Capote
DATOS TÉCNICOS
Mis pequeñas cuatro estaciones, de Ara Malikian.
ARA MALIKIAN violín
JOSÉ VÉLEZ violín
HUMBERTO ARMAS viola
DRAGOS BALAN violonchelo
MARISOL ROZO narración
23 de abril 12:00h
Teatro Lara (Corredera Baja de San Pablo, 15)
50 MINUTOS
Para toda la familia (los niños pagan a partir de los 2 años o siempre que ocupen asiento)
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